miércoles, 31 de agosto de 2016

La historia de terror más corta del mundo





El último hombre sobre la tierra estaba sentado solo en una habitación. De repente, tocan a la puerta.

"Knock" (Fredric Brown -1948)


lunes, 29 de agosto de 2016

Deja vu (cuento corto)



          Tengo la sensación de haber vivido esto. Algunas personas lo llaman deja vu, otras personas creen que se trata de recuerdos de nuestras vidas anteriores. La verdad, no lo sé. Conozco esta calle. Puedo reconocer el árbol mal podado de la casa de rejas verdes; el perro que duerme acobachado bajo la ventana del café, y la anciana que saluda desde la otra esquina. Una sensación extraña recorre mi cuerpo mientras espero en la vereda que corte el semáforo para poder cruzar, pero me distraigo al verla a ella: una muchacha de pelo rojizo que me mira sonriente desde la parada del colectivo. Es muy bonita, le devuelvo la sonrisa. Conozco esos ojos, ya los vi en alguna otra parte, pero no recuerdo donde. La lluvia empieza a mojarme. La misma lluvia de alguna otra tormenta. Me recuerda que siento frío. Me tapo con la campera por encima de la cabeza, el semáforo esta por cambiar. Me parece haber hecho ya esto. Todo es tan familiar. Vuelvo a sentir esa sensación extraña y reconozco el grito de la mujer que estaba parada atrás mío. Alguna vez lo escuché, lo sé. También reconozco ese ruido tan particular, el de las cubiertas de un auto chillando contra el asfalto. Ese olor tan familiar que invade en mi nariz. ¿Cuándo fue que lo sentí? No tengo tiempo de recordarlo, algo me golpea y siento que vuelo por el aire. El golpe duele demasiado, pero la caía es peor. Paso un rato confundido... 
          Ahora ni puedo levantarme, estoy aterrado. Siento mojada la cabeza y bajo mi cuerpo, el frío del asfalto. Un frío que alguna vez ya había sentido. Es todo tan familiar. Las caras a mi alrededor, las conozco a todas, pero no puedo hablar. Mi cuerpo se entumece y no puedo respirar. Ya viví esto. Sé lo que viene ahora: un frío desgarrador y una oscuridad inmensa. Tengo la sensación de haber vivido esto. Algunas personas lo llaman deja vu, otras personas creen que se trata de recuerdos de nuestras vidas anteriores. La verdad, no lo sé. Conozco esta calle. Puedo reconocer el árbol mal podado de la casa de rejas verdes; el perro que duerme acobachado bajo la ventana del café, y la anciana que saluda desde la otra esquina. Una sensación extraña recorre mi cuerpo mientras espero en la vereda que corte el semáforo para poder cruzar.


Autor: Jesús Trodler
De la antología "Vislumbrando horizontes Libróptica 2014"
Disponible GRATIS en: http://www.libroptica.com/VislumbrandoHorizontes.html

Medusa



El óleo de tus besos, lava inerte
que engulle hasta los fines de mis huesos
dejándome en la carne los espesos
y tétricos sabores de tenerte.

Serpientes que llevás en tu cabeza
me muerden con vigor y me desgarran
los músculos en trozos y acorralan
mi sangre con veneno. La crudeza

de toda tu figura enfurecida
me llena de terrores en el alma
y el pobre corazón no tiene calma.

Amarte fue un error, enardecida
se presta tu mirada echando el karma
en ruinas de mi vida endurecida.



Del libro "Funesto" (Libróptica 2014)
Disponible en: http://www.libroptica.com/Funesto.html

miércoles, 24 de agosto de 2016

Alberto Laiseca

Escritor Argentino (1941-2016)

Los monstruos de la casa no impidieron
que crezca esa pasión por el oscuro
camino de las letras, siempre duro
y lleno de tristezas que invadieron.

Los huecos de la noche te mintieron,
amor no es otra cosa que un conjuro
amargo y peligroso; un inseguro
recuerdo de fantasmas que vinieron.

El humo en tu sonrisa y la figura
de lobo solitario de la estepa
o espectro susurrándole a los vientos

que siempre reflejaste en tu escritura,
mil huellas dejarán, y que se sepa,
tu sangre derramaste en esos cuentos.


Del libro "Funesto" (Libróptica 2014)
Disponible en: http://www.libroptica.com/Funesto.html

viernes, 5 de agosto de 2016

Cosecha



Pasa el tiempo y pasa lento
pero el fin igual se acerca
cada tanto pasa el viejo
en busca de su cosecha.

Es la noche, cual tan bella
como estrella que más brilla
y la sombra apaciguada
se apodera de la vida.

Caen las tristes melodías
con el llanto de olvidadas
sobre cruel madera fría
y él se ríe a carcajadas.

Casi nunca o casi siempre
bien sorprende su llegada,
él se adueña de mis sueños
en sombrías madrugadas.



Del libro "Versos Mustios" (Dunken 2010)
http://www.dunken.org/WEB2014/index.php?opt=2&id_titulo=10160