miércoles, 1 de mayo de 2013

Necia



Una luna que ya nadie ilumina
y un sol, que no comparte el fuego.
Un río, que es sólo un río
y un poema que ya nadie leerá.
Una melodía encadenada
a la triste soledad de un contrabajo
y un hablar vacío, abandonado
como nadie, como yo.

Una verdad, dormida en el silencio,
una rosa marchita y desangrada.
Tu voz en la pared, deshabitada
y mis ganas de morir en cualquier lado.
Un verso que no encaja, entre la desilusión
y la cama vacía, rota, reventada
por este recuerdo tan odioso, tan triste
como nadie, como yo.

Una lagrima seca, desalmada
que no encuentra su dolor
porque no le duele estar sola
lo que le duele es el amor,
es tan necia... y tan culpable
como nadie, como yo.